DOS LUCEROS

Ya teníamos un sol, desde hacía cuatro años.
Tanta luz nos alumbró, que un lucero deseamos.
Aunque nos pille mayores, ¡será mejor arriesgarnos!
Para que no crezca sola, le daremos un hermano.
Sospechamos la noticia, por los reyes de aquel año,
¡Ojalá que sea niño! dijo papá emocionado.
Corrí a consultar a Isaura, ella podría confirmarlo.
Y, lo hizo, y con las cuentas: "el 22 engendramos"
El día de la lotería, ¡el gordo nos ha tocado!
El médico lo confirma, ¡era un gordo muy pesado!
¡Que no es uno, que son dos!, le dije a Quino llorando.
Lo que importa es que están bien, traerán el pan bajo el brazo.
Mucho miedo pasé yo, creí no poder soportarlo.
En un cuerpo tan pequeño, ¿como iríais desarrollando?
Pero vaya si lo hicisteis, con reposo y mil cuidados.
Y mucho que se agrandó, ¡este cuerpo pequeñajo!
El amor todo lo puede, porque amar es decisión, con valor da resultados.
¿son gemelos o mellizos? ¿cual de los dos es mayor? todo el mundo preguntando.
Son gemelos de ocho meses, pero bien desarrollados.
Pues nacisteis con tres kilos, un agosto acalorado.
Había que elegir dos nombres, nunca mas de uno pensamos.
El tuyo, lo escogió Noa, Brais es un nombre de trasno.
Roi lo elegimos nosotros, de gallegos heredado.
Es un misterio dar vida, si es a dos, es un milagro.
Una célula partió, y ya está: complementarios.
Y, sois dos almas gemelas, un par de dos, amarrados.
Papá solía decir: dos cuerpos, dos pies, dos brazos, pero una cabeza pensando.
Los dos pensáis al unísono, los dos crecéis igualados.
Aportáis vida a mis sueños, risa e ilusión al llanto.
Ilumináis mis tinieblas, aliviándome el pasado.
En vosotros vive "El". ¡Amor cuánto te he añorado!
Consuela veros crecer, pensar que os estáis formando.
Y, permitís ¡mis chiquillos! que podamos "recrearlo"