domingo, 24 de enero de 2010
viernes, 22 de enero de 2010
lunes, 18 de enero de 2010
Razones



Al alba.
Trata de aminorar,
La marcha.
No arriesgues. No te pierdas.
Continúa en la vieja senda.
Ralentiza tus latidos,
Marca el paso.
Desoye los cantos de sirenas.
Átate al mástil de la sensatez.
Sé como Ulises, sigue el rumbo.
La fiel cordura.
Al campo pondrá puertas.
Atenuados por la inactividad.
Alejarás las dudas y los miedos.
Aléjate de lagos esmeralda.
Para no verte reflejado en lunas nuevas.
Tratar de imponer al corazón razones.
Se asemeja a navegar en la tormenta.
domingo, 17 de enero de 2010
miércoles, 13 de enero de 2010
Tu recuerdo
sábado, 2 de enero de 2010
A todos, Gracias.
¡Os doy gracias!
A todos los que durante este año,
habeis bebido en mis palabras.
Y a los que me habeis alimentado con las vuestras.
Gracias por mostrarme caminos que transitar.
Por ofrecerme lugares de descanso.
Por invitarme a ver paisajes nuevos.
E iluminar mis tinieblas con vuestra luz.
Gracias por regalarme vivos colores,
que alejaron el gris de mis días.
Por compartir mis sueños. Por ser mi espejo.
Gracias a todos los que me enseñasteis
que el dolor transforma y ayuda a crear.
Por ayudarme a entender la esperanza,
con vuestras amables palabras. Gracias.
Mi corazón está hoy con los que sufren
y aquellos aquejados de soledad, para todos
la primera entrada del año.
Para Gloria, que vela a su marido en estas horas.
Para Pablo, Antón y Aldara, que perdieron a Anita.
Para Andrés, que busca a su hermano ausente
en bellos amaneceres.
Para Rosa, que acaba de enterrar a su padre.
Para Noa, Roi y Brais, y toda mi familia,
que hemos acabado por segunda vez un año,
con la ausencia de Quino, desgarrándonos el corazón.
Para todos, con mis deseos de serenidad y armonía.
Feliz 2010
A todos los que durante este año,
habeis bebido en mis palabras.
Y a los que me habeis alimentado con las vuestras.
Gracias por mostrarme caminos que transitar.
Por ofrecerme lugares de descanso.
Por invitarme a ver paisajes nuevos.
E iluminar mis tinieblas con vuestra luz.
Gracias por regalarme vivos colores,
que alejaron el gris de mis días.
Por compartir mis sueños. Por ser mi espejo.
Gracias a todos los que me enseñasteis
que el dolor transforma y ayuda a crear.
Por ayudarme a entender la esperanza,
con vuestras amables palabras. Gracias.
Mi corazón está hoy con los que sufren
y aquellos aquejados de soledad, para todos
la primera entrada del año.
Para Gloria, que vela a su marido en estas horas.
Para Pablo, Antón y Aldara, que perdieron a Anita.
Para Andrés, que busca a su hermano ausente
en bellos amaneceres.
Para Rosa, que acaba de enterrar a su padre.
Para Noa, Roi y Brais, y toda mi familia,
que hemos acabado por segunda vez un año,
con la ausencia de Quino, desgarrándonos el corazón.
Para todos, con mis deseos de serenidad y armonía.
Feliz 2010
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